16 sept 2011

Hoy vamos a hablar de los orígenes de dos muy conocidas: siesta y tapas. Se me ha ocurrido plantear un breve juego que creo que puede ser bastante divertido: en primer lugar tenéis que intentar adivinar cual de las siguientes teorías sobre el origen de la siesta es la correcta:
El burro explosivo durmiendo  la siesta
  1. Debido al calor, en España en verano es muy difícil trabajar. Por eso después de comer y sobre todo en los sitios más calurosos los trabajadores se echaban una siesta. De esta forma esperaban a que no hiciera tanto calor. El resto de la familia tampoco podía molestar a la persona que dormía, por eso también dormía la siesta.
  2. Como todos sabéis cuando hacemos la digestión (proceso de transformación de los alimentos después de comer) toda nuestra sangre baja al estómago y provoca una sensación parecida al sueño. En España normalmente hacemos comidas más abundantes que en otros países, por lo tanto baja mucha más sangre y necesitamos dormir porque no tenemos sangre suficiente para hacer otras cosas.
  3. Los monjes durante el siglo XVI estaban obligados a descansar entre las 12 y las 3. No podían hablar ni hacer otro tipo de actividad. Por eso estaban, por así decirlo, obligados a dormir la siesta a la sexta hora, de ahí que ahora hablamos de dormir la siesta.
Perfecto, pues ahora intentad adivinar cual es el origen de otra palabra muy española: las tapas.
Algunas tapas españolas
  1. El rey Alfonso X, durante el siglo XIII obligó a todos los taberneros (camareros) a servir algo de comida para evitar que la gente se emborrachara. 
  2. Después de la guerra civil española, durante la dictadura de Franco la gente era bastante pobre y pasaba bastante hambre. Por eso comían muy poco, poca cantidad, para "tapar" (engañar) al estómago. Por eso las tapas son platos con poca comida.
  3. En España, como en otros muchos países, solían cocinar solo las mujeres. Cuando cocinaban, sus hijos y su marido siempre estaban molestando en la cocina comiendo directamente de las cacerolas. Para evitar esto ponían un plato encima de las cacerolas con un poco de comida para tener ocupados a los ladrones de la cocina.

    9 sept 2011

    Todos conocemos a Alejandro Finisterre. Seguro que pensarás: ¿quién demonios es Alejandro Finisterre? Pues la respuesta es muy sencilla: un gallego inventor del fútbol de mesa, también conocido como futbolín.

    Según la noticia publicada por la revista "Muy interesante" el futbolín fue inventado durante la Guerra Civil española (1936-1939) por Alejandro Finisterre. Lo ideó en un sanatorio que acogía a niños mutilados con el propósito de ayudar a su rehabilitación, puesto que no podían jugar al fútbol de verdad. En circunstancias normales, con un invento así se habría hecho de oro (hacerse rico). Pero no durante la durísima posguerra franquista no tuvo oportunidad de reclamar su patente. Se trataba de un rojo (comunista), de un vencido y tuvo que huir de España a Francia después del fin de la guerra. 

    Sin embargo he comprobado en la web que hay otras dos personas más a las que se les atribuye este entretenido invento: al inglés Harold Searler Thorton y al francés Lucien Rosengart, aunque no está del todo claro. De todas formas quiero seguir pensando que mi paisano Alejandro Finisterre sigue siendo el inventor de este fantástico juego.¡Galicia campeona del mundo de futbolín! Jejejeje... Veamos algunos ejemplos de tipos de futbolines:
    Futbolín gallego

    Futbolín Portugués
    Futbolín polaco
      










    P.D. Me ha parecido muy chulo (bonito) el nombre que recibe el futbolín en Polonia: Piłkarzyki (Pequeño futbolista).

    7 sept 2011

    ¡Hola a todos! Después de unas merecidas vacas volvemos al curro con la misma ilusión del primer día. Se acabaron los días tirado en la playa sin nada que hacer, tostándome al sol, sin madrugones, sin horarios, sin preocupaciones... ¡Buaaaaa! ¡Quiero que vuelvan las vacaciones!

    Coloquialismos
    Vacas: vacaciones
    Curro: trabajo
    Tirado: descansando
    Tostándome al sol: tomando el sol de una forma muy intensa
    Madrugones: días en los que hay que levantarse muy temprano